“Amados, no os sorprendáis del fuego de prueba que os ha sobrevenido, como si alguna cosa extraña os aconteciese, sino gozaos....” 1 Pedro 4:12,13
Diana y Ricardo salieron a dar un paseo vespertino en bicicleta esperando regresar a casa sintiéndose como nuevos, en vez de ello, sus vidas cambiaron para siempre. Cuando Ricardo bajaba por una colina, perdió el control de su bicicleta y chocó. Su cuerpo quedó destrozado y casi no llegó vivo al hospital. Diana hizo fiel vigilia junto a su esposo. Él no podía alimentarse solo y no podía caminar. Un día, cuando ambos estaban sentados bajo la sombra de un árbol frente al hospital, Ricardo dijo: "Diana, no sé si alguna vez volveré a caminar, pero estoy aprendiendo a caminar más cerca de Jesús, y eso es lo que realmente necesito y quiero".
En lugar de quejarse y amargarse contra Dios, Ricardo extendió su brazo y se asió de la mano de Dios. Algunas veces, en medio de nuestras pruebas, necesitamos pensar en alguien como Ricardo para que nos ayude a ajustar nuestra perspectiva y recordarnos de la extraordinaria relación que tenemos o que podemos llegar a poseer con Dios, por medio de Jesucristo. Esta es la relación que más necesitamos cuando nuestro caminar aquí se hace más y más difícil.
No estamos equipados para manejar todos los problemas que enfrentamos, pero Dios sí lo está. Esa es la razón por la que nos dijo que se lo diéramos todo a Él: "echa sobre el SEÑOR tu carga" (Sal. 55:22). Tal y como descubrió Ricardo, caminar con Jesús no depende de nuestras piernas, depende de nuestro corazón, disposición y disciplina del tiempo.
Reflexión: Podemos atravesar las pruebas más oscuras cuando caminamos con la luz de Dios.
Diana y Ricardo salieron a dar un paseo vespertino en bicicleta esperando regresar a casa sintiéndose como nuevos, en vez de ello, sus vidas cambiaron para siempre. Cuando Ricardo bajaba por una colina, perdió el control de su bicicleta y chocó. Su cuerpo quedó destrozado y casi no llegó vivo al hospital. Diana hizo fiel vigilia junto a su esposo. Él no podía alimentarse solo y no podía caminar. Un día, cuando ambos estaban sentados bajo la sombra de un árbol frente al hospital, Ricardo dijo: "Diana, no sé si alguna vez volveré a caminar, pero estoy aprendiendo a caminar más cerca de Jesús, y eso es lo que realmente necesito y quiero".
En lugar de quejarse y amargarse contra Dios, Ricardo extendió su brazo y se asió de la mano de Dios. Algunas veces, en medio de nuestras pruebas, necesitamos pensar en alguien como Ricardo para que nos ayude a ajustar nuestra perspectiva y recordarnos de la extraordinaria relación que tenemos o que podemos llegar a poseer con Dios, por medio de Jesucristo. Esta es la relación que más necesitamos cuando nuestro caminar aquí se hace más y más difícil.
No estamos equipados para manejar todos los problemas que enfrentamos, pero Dios sí lo está. Esa es la razón por la que nos dijo que se lo diéramos todo a Él: "echa sobre el SEÑOR tu carga" (Sal. 55:22). Tal y como descubrió Ricardo, caminar con Jesús no depende de nuestras piernas, depende de nuestro corazón, disposición y disciplina del tiempo.
Reflexión: Podemos atravesar las pruebas más oscuras cuando caminamos con la luz de Dios.
LAS PRUEBAS, un enfoque verdadero:
1- Las pruebas son los peldaños que nos permiten ascender a la excelencia del propósito de Dios para nuestras vidas. Dios tiene un propósito para cada uno de los que somos de él. Dios anhela que cumplamos con ese propósito. Dios usa las pruebas para ayudarnos a cumplir con su propósito.
2- Las pruebas son la manera para tener un conocimiento más profundo de Dios. Eso fue lo que experimentó Job. Este personaje no era una mala persona. Todo lo contrario, mire el testimonio que la Biblia da de él.
3- Las pruebas son las herramientas que utiliza Dios para perfeccionar nuestro carácter, y una cualidad de el es la paciencia o la capacidad de soportar adversidades sin desmoronarnos. Esta virtud se aprende por medio de las pruebas.
1- Las pruebas son los peldaños que nos permiten ascender a la excelencia del propósito de Dios para nuestras vidas. Dios tiene un propósito para cada uno de los que somos de él. Dios anhela que cumplamos con ese propósito. Dios usa las pruebas para ayudarnos a cumplir con su propósito.
2- Las pruebas son la manera para tener un conocimiento más profundo de Dios. Eso fue lo que experimentó Job. Este personaje no era una mala persona. Todo lo contrario, mire el testimonio que la Biblia da de él.
3- Las pruebas son las herramientas que utiliza Dios para perfeccionar nuestro carácter, y una cualidad de el es la paciencia o la capacidad de soportar adversidades sin desmoronarnos. Esta virtud se aprende por medio de las pruebas.
4- Las pruebas son la forma de Dios para mantenernos humildes. Nuestra naturaleza pecaminosa nos induce a pensar que somos los mejores, los más importantes. Dios utiliza las pruebas para bajarnos de esa nube rosada y ponernos en nuestro lugar.
5-Las pruebas son oportunidades para que Dios muestre su poder soberano. Si no hubiera pruebas, no habría oportunidades para que Dios manifieste su poder soberano.
5-Las pruebas son oportunidades para que Dios muestre su poder soberano. Si no hubiera pruebas, no habría oportunidades para que Dios manifieste su poder soberano.
Autor: La Biblia dice - David Logacho